La magia depende de nuestra capacidad de comprender cómo funcionan los poderes que estamos invocando. Las leyes herméticas nos definen como son esos poderes.
Esos poderes funcionan constantemente en nuestras vidas, por ello no es necesario invocarlos.
Para cada hechizo o ritual existe un tipo de fuerza hermética que ejerce más influencia sobre él. Cuando lo descubrimos, nuestra magia se hace mucho más eficaz.
Estas leyes están basadas en la física del Universo y se basan en el movimiento circular e infinito que actúa sobre todas las demás leyes.
Ley de causa y efecto:
Nada en este mundo sucede por casualidad, todo tiene su causa y es el efecto de otra causa. Es una cadena infinita de causas y consecuencias.
Ley de Correspondencia:
Así como es arriba, es abajo. Como es abajo, es arriba. La característica de uno es igual a la del otro.
Ley del Género:
Todo y todos tenemos un lado femenino y un lado masculino. Así está formado el Universo. El termino chino yin-yang considera esa idea como la base para el equilibrio. Nuestro anima (poder femenino) y nuestro animus (poder masculino) deben estar siempre en armonía.
Ley de la Mente:
Todo lo que existe, visible u oculto, funciona porque forma parte de un “todo”. Todo forma parte de un poder absoluto.
Ley de Polaridad:
Todo tiene su polo opuesto para que exista un equilibrio perfecto y el funcionamiento continuo del ciclo del Universo. Solo los lados opuestos consiguen unirse, transformándose en una parte del conjunto del Universo. ✨
Ley del Ritmo:
Esta ley explica que las cosas están siempre en constante movimiento. La transformación se concreta a través de la secuencia repetida de un mismo movimiento.
Ley de Vibración:
Todo tiene su infinita vibración. Aunque algunas cosas parezcan estar en reposo, en verdad están dentro del Universo que no para de vibrar.
Info: “Curso de Magia Natural” por Morgan Green.
Imágenes: pixabay.com
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