Las flores son una fuente de propiedades beneficiosas para la piel al igual que los aceites y las hierbas.

Cuando se emplean como base de exfoliantes faciales sus beneficios se multiplican, ya que las flores actuan como un agente suave, muy apropiado para la piel del rostro. Al realizar su acción de forma moderada, se puede aumentar su uso hasta tres veces por semana.
Ingredientes:
- Lavanda
- Manzanilla
- Caléndula
- Agua de Rosas
Añade a un vaso de agua de rosas una cucharadita de flores de lavanda molidas, manzanilla picada y caléndula.
Revuelve bien y deja reposar una hora.
Aplica sobre tu rostro, cuello y escote con movimientos circulares suaves.

Info: “Recetas de Cosmética Natural” de Noemí Marcos y Fernando Cabal
Imágenes: Freepik
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